Mario Monje, Secretario General del Partido Comunista de Bolivia (PCB) durante la guerrilla del Che Guevara, falleció el 15 de enero de 2019 a la edad de 89 años. Fue sepultado en un cementerio de Moscú. Su negativa de apoyar al Che en Ñancahuazú le valió el estigma de traidor. Este texto desmiente tal cosa y, si acaso, le hace justicia.
Mario Monje Molina nació el año 1929 en la localidad yungueña de Irupana. Vivió la mitad de su larga vida en Moscú, la capital rusa, ciudad a la que llegó en 1971 tras el golpe de Estado que derrocó al general Juan José Torres en Bolivia. Monje no era un exiliado más del banzerismo. Aterrizaba en la Unión Soviética con el estigma de haber traicionado al Che Guevara, aquel sagrado ícono de la izquierda internacional.
Este 31 de agosto de 2017 se cumplieron 50 años de la desaparición física de los guerrilleros del grupo de la Retaguardia al mando del cubano Juan Vitalio Acuña Núñez (Joaquín) que cayó en la emboscada de Puerto Mauricio, en el Río Grande.
Ese día fueron masacrados los cubanos Juan Vitalio Acuña (Joaquín), Israel Reyes Zayas (Braulio) y Gustavo Machín Hoed De Beche (Alejandro); los bolivianos Moisés Guevara Rodríguez, Apolinar Aquino Quispe (Apolinar) y Walter Arancibia Ayala (Walter), y torturado y asesinado Freddy Maymura (Ernesto); el 4 de septiembre asesinado el médico peruano Restituto José Cabrera Flores (Negro), en el río Palmarito. Posteriormente fue encontrada Tania, sin vida, cerca del río, lejos del vado donde se produjo la emboscada.
Antecedentes
Después del combate del 23 de marzo de 1967 quedaron en la zona guerrillera el francés Regis Debray, el argentino Ciro Roberto Bustos, el peruano Juan Pablo Chang-Navarro (Chino) y Haydée Tamara Bunke (Tania).
El 16 de abril el Che decidió acompañar al francés y al argentino rumbo a Muyupampa, población situada en el camino Camiri – Sucre. También decidió que el médico peruano Restituto José Cabrera Flores (Negro), se quedara al frente de la atención de los enfermos, entre ellos Tania, el cubano Gustavo Machín Hoed De Beche (Alejandro), ambos con fiebre alta, los bolivianos Moisés Guevara Rodríguez, con un fuerte cólico de las vías biliares y Serapio Aquino Tudela, con problemas en una pierna. El 17 acamparon en las cercanías del caserío Bella Vista con la indicación de mantenerse en ese paraje hasta el regreso del Che y sus compañeros.
50 ANIVERSARIO DE LA CAÍDA EN COMBATE DE TANIA LA GUERRILLERA.
SEGUNDA PARTE
La tumba de Tania quedó anónima durante 31 años, y la búsqueda fue tarea constante y en silencio. Pocos conocían que su cadáver fue sacado del cementerio, donde en 1984, nos llevaron a observar una cruz que supuestamente señalaba el lugar; y a un nicho municipal donde se indicaba el destino final. Pero en ninguno de ambos sitios se encontraba.
El 13 de febrero de 1998, el ingeniero cubano Noel Pérez, cuando realizaba una investigación geofísica, encontró el cadáver del combatiente boliviano Julio Luis Méndez Korner (Ñato), lo que añadió nuevas pistas. Sus huesos fueron trasladados a Cuba y el 30 de diciembre de 1998 colocados en su correspondiente nicho del Complejo Escultórico “Ernesto Che Guevara” de la ciudad de Santa Clara.
Según las investigaciones históricas el antropólogo cubano Héctor Soto, obtuvo la información de que Tania estaba enterrada fuera del cementerio y el doctor Jorge González se entrevistó con un soldado que le dio la misma información. Esas versiones indicaban que había sido enterrada en las proximidades de una cerca de árboles en el fondo del Regimiento Militar Pando, perteneciente en 1967 a la VIII División.
50 ANIVERSARIO DE LA CAÍDA EN COMBATE DE TANIA LA GUERRILLERA.
Primera Parte
El 7 de septiembre de 1967 el Che anotó en su diario que la Radio la Cruz del Sur anunció el hallazgo del cadáver de Tania en las márgenes del Río Grande y que fue llevado a Santa Cruz. Al día siguiente consigna que la emisora trajo la información de que Barrientos había asistido a la inhumación y que se le dio “cristiana sepultura y que luego estuvo en Puerto Mauricio, que es la casa de Honorato."
Después de la emboscada los campesinos estaban atemorizados, las amenazas, prisión, malos tratos, golpes y torturas los habían neutralizado, conocían la traición de Honorato Rojas y no querían verse en una situación similar.
Sobre esta situación el guerrillero cubano Alberto Fernández Montes de Oca (Pacho) escribió: “Los campesinos temen la represión y ponen como ejemplo a Honorato que fue llevado con su familia a La Paz”. El presidente René Barrientos premió al traidor con cinco hectáreas de terreno a unos seis kilómetros de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, donde vivía oculto.
El 6 de julio de 1967 un comando de seis guerrilleros tomó la ciudad de Samaipata, capital de la provincia Florida en el departamento boliviano de Santa Cruz, acción que tuvo amplia repercusión en los medios informativos.
A finales de ese mes jóvenes de Vallegrande, capital de la provincia del mismo nombre y vecina de Florida, pintaron en los muros del estadio y en las paredes de las principales calles de esa ciudad, consignas de apoyo a las guerrillas acción que conmocionó a la población. Los servicios de inteligencia y del DIC, (Dirección de Investigación Criminal), comenzaron una intensa represión para encontrar a los responsables y el 31 de julio, hace 50 años, después de detenerlos, los encarcelaron y torturaron.
El profesor boliviano Remberto Cárdenas, docente de la Universidad Mayor de San Andrés en La Paz, quien fuera en 1967 presidente del gremio de periodistas y dirigente estudiantil en la Universidad de Santa Cruz de la Sierra, narró que un grupo de militantes de la Juventud Comunista fueron los que “rallaron” los muros del estadio y en las calles.. Manifestó, que en esa ciudad funcionaba el único motor que daba luz a la población desde la seis de la tarde a diez de la noche. Cada cierto tiempo se renovaba el aceite quemado y esos jóvenes lo obtuvieron para pintar las consignas.
Hace 50 años, un grupo militar tomó por asalto Siglo?XX y Catavi, en el norte de Potosí.
La madrugada del 24 de junio de 1967, un contingente militar tomó por asalto los campamentos mineros de Siglo?XX?y Catavi.?La misión no era solamentecupar las sedes de los sindicatos, sino también y sobre todo escarmentar a los trabajadores mineros que habían decidido apoyar a la guerrilla del?Che, quien para esas fechas ya estaba operando en el sudeste de Bolivia.
En efecto, hace 50 años, los mineros y sus sindicatos estaban en la mira del gobierno de René Barrientos y de sus asesores estadounidenses de la contrainsurgencia. La llegada del?Che Guevara alertó a Washington, que puso los recursos necesarios para el adiestramiento y equipamiento de tropas especiales bolivianas. De hecho, llama la atención la creación del Regimiento Rangers (guardabosques en castellano) que se dio justo en esos años, según se lee en la prensa de la época.
Efraín Quicáñez Aguilar (‘Negro José’) narra la operación de rescate de tres de los guerrilleros sobrevivientes del Che Guevara. La narrativa tiene episodios dignos de suspenso. Es una burla al imperialismo y parte de la historia...
1º Pan Comido: memoria de la operación rescate de los guerrilleros sobrevivientes del Che, de Efraín Quicáñez Aguilar (‘Negro José’), es un libro de aventuras apasionante.